domingo, 29 de abril de 2012

Étant donnés








Agujas de pino duerme

                                               tu boca.



El río, fácilmente, te parodia.



Cruje la carne lenta.



Estallan

                           de madera, mis manos.


3 comentarios:

  1. Breve e intenso... Eres admirable, que diría Rubén Darío.

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  2. Muchas gracias, Fernando, me alegra que opines así, tenía dudas sobre la brevedad de este poema.

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  3. Es "agujas", no "aguas". Gracias, Rebeca, por señalarme la errata. Eso me pasa por ser perezosa y no repasar lo que publico. Ya está corregido.

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